Es un componente esencial de la vida de todo ser humano, hombre o mujer.
Es una dimensión de la personalidad impregnada.
Como lenguaje del instinto, desde lo biológico, la sexualidad humana es similar a la de otras especies.
Se puede asumir el ejercicio de la sexualidad siendo heterosexual (hombre–mujer), homosexual, bisexual, transexual, transgénero, entre otros.
Para algunos es una cuestión de poder, alguien domina y alguien se deja dominar; alguien juega un rol pasivo dentro de la relación mientras alguien es más activo.
El sexo puede ser fugaz y errático, improvisado, vertiginoso, sin ataduras, sin mucha consistencia, parecido al mundo que hoy vivimos.

Sexualidad actual
Hoy día es muy fácil establecer vínculos y la “cyber sexualidad” es una realidad que configura nuevas formas de interacción virtual, aceptadas a nivel socio-cultural.
La sexualidad es también un “lenguaje para la libertad y el amor”, que lo hace fundamentalmente humano. “Yo soy lo que escojo ser”, el sujeto escoge su propia orientación sexual conforme a su deseo, su historia, su vida, condiciones y no desde la predeterminación biológica.